Infusiones para estar activo

Infusiones y actividad es buen binomio. A veces, un remedio saludable y natural es suficiente para conseguir estar más activos, sin necesidad de recurrir a fármacos ni medicamentos. No descubrimos ningún secreto si decimos que hay plantas con efectos relajantes y que nos ayudan a conseguir un ansiado bienestar. Sin embargo, hay otras que también tienen efectos estimulantes que pueden ayudarnos a reactivar nuestro estado emocional de una forma sencilla y sana.

Buenos ejemplos de la relación entre infusiones y actividad.


El mejor exponente de esta combinación lo encontramos en la medicina tradicional china, que se basa en el Chi o energía vital equilibrada. En algunas zonas de Asia consideran que el Chi recorre el cuerpo de una personal y es el encargado de equilibrar el espíritu y las emociones. Según estas creencias, la enfermedad se produce cuando el Chi se descompensa y lo solucionan con remedios naturales, además de ejercicio, meditación, acupuntura y masajes terapéuticos.

Lo cierto es que en nuestra cultura, también existe la tradición de utilizar plantas y remedios naturales para recuperar estímulos y conseguir el bienestar. En el caso de la relación entre infusiones y actividad, hay determinadas plantas que pueden ayudarnos a estar más activos.

Una de ellas, de hecho la más conocida, es el Ginseng. Muchos complejos vitamínicos populares y de venta en farmacias lo contienen por sus poderes estimulantes. El más aconsejable para tomar en infusión es el Ginseng blanco, ya que el Ginseng Rojo, a veces, puede provocar problemas de insomnio.

También tienen efectos reactivantes otras plantas medicinales como el Ashwangandha, conocido como Ginseng indio. Es un pequeño arbusto que crece en Asia y América y nos puede ayudar a estimular la actividad mental. Por otra parte el Hipérico, o Hierba de San Juan, está muy recomendado en el caso de mujeres que padecen los trastornos de la menopausia, ya que compensa la tristeza que a veces producen los cambios hormonales.

En este apartado también incluimos la Schisandra Chinensis, cuyos efectos son muy conocidos en la medicina tradicional china. En este país la llaman Fruta de los Cinco Sabores, y sus bayas ayudan a combatir el estrés y la fatiga. Por último, destacamos la Rhodiola Rosea, una planta que mejora el ánimo y reduce la ansiedad.

Qué hacer para recuperar la energía perdida.


Muchas veces, estamos poco activos, sencillamente, porque hemos dormido mal, estamos cansados o nos sentimos preocupados. En estos casos, lo importante es solucionar el problema de raíz. Es decir, recuperar horas de sueño, modificar nuestros horarios o darle solución a los problemas que nos acucian.

Otras veces, se trata más de estados pasajeros que tienen relación con el entorno. Por ejemplo, el cambio de estación o el final de las vacaciones. En estas ocasiones, es mejor no darle demasiada importancia a los síntomas ya que suelen regularse en pocos días. Pero, si recurrimos a infusiones para estar activos como las que hemos enumerado en este artículo, sobrellevaremos mejor la situación. No olvides que la relación entre infusiones y actividad, a veces es la clave para reactivarnos de una manera sencilla y saludable.

En cualquier caso, hay determinados aspectos que siempre van a ayudarnos y nos harán sentir mejor. Por ejemplo, exponernos al sol todo lo posible para generar más melatonina. También, seguir una dieta rica en fibra, verduras y frutas y pobre en grasas. El ejercicio físico regular y constante es otro motor que hace mejorar nuestro estado de ánimo. Y, por último, las infusiones naturales con efectos estimulantes, para recibir una ayudita extra en este sentido.

Recomendaciones para consumir y conservar las infusiones.


En vista de los buenos efectos que el binomio infusiones y actividad puede reportarnos, también queremos plasmar aquí algunos consejos para sacarle a las plantas medicinales y saludables todo su potencia.

Si vas a comprar o conseguir infusiones para estar activo, ten en cuenta que puedes tomarlas tanto frías como calientes. Es cierto que, a altas temperaturas, los aceites esenciales de las mismas son más potentes. Pero también en verdad que, en verano, suele apetecernos más consumirlas frescas o con hielo.

En cualquier caso, debes conservarlas en un lugar seco y oscuro, además de hermético, para mantener intactas sus propiedades, su sabor y su aroma. Y consúmelas en poco tiempo para que no se echen a perder.