Los beneficios de la comida asiática

¿Sabías que los habitantes de Asia son los más longevos del planeta? Además, la población de los países como China, Japón o India no suele presentar problemas de hipertensión ni de exceso de peso. Son datos corroborados por la Organización Mundial de la Salud y que demuestran que la comida asiática es mucho más sana y beneficiosa para el organismo. Lo cierto es que, la gastronomía de Asia está de moda. Nosotros vamos a intentar fijarnos en sus virtudes y características, para extrapolar sus mejores aportaciones.

La cocina asiática y sus propiedades.

La sopa como primer plato es un símbolo distintivo de la comida asiática y se elabora a partir de mariscos, algas, pescados a los que después se les añade la pasta. Las sopas tienen un gran poder diurético y saciante, con lo cual evita los excesos del comensal con la llegada del plato principal. Esto, junto al consumo de cereales, sobre todo arroz, en grandes cantidades, son sus principales características.

Su presencia en medio del Índico y el Pacífico, hace que la presencia del pescado sea muy rica y abundante. Aporta omega 3 en grandes cantidades y previene la aparición de patologías cardiovasculares. Las verduras y las frutas son otro puntal de la dieta asiática y suelen comerse poco cocinadas.

Por el contrario, la carne no es demasiado habitual en los platos que integran la comida asiática, al menos la de vacuno. La carne de cerdo sí que consume pero es cierto que su consumo no es apto en algunas zonas y para algunas religiones autóctonas. Los insectos también forman parte de su gastronomía en algunas zonas concretas de Asia, sobre todo en zonas de de China, Vietnam y Tailandia.

Por lo demás, en la comida asiática no destaca el consumo de grasas ni azúcares, perjudiciales para el organismo.

Beneficios de la comida asiática

La comida asiática es rica en fibra y nutrientes y muy equilibrada. Todo lo contrario a buena parte de la gastronomía occidental, donde cada día aumentan los problemas relacionados con la hipertensión, la diabetes, y otras enfermedades. Veamos sus beneficios:

  • Utiliza ingredientes sanos y frescos y los cocina al vapor o en el wok, con lo cual conservan sus propiedades. Son bajos en calorías.
  • Condimenta los platos con salsas y especias y utiliza poca sal.
  • Sustituyen las propiedades de la leche con el aporte en calcio de algunos vegetales. Y previenen la osteoporosis con la ingesta de soja, muy habitual en su dieta.
  • Comer con palillos ayuda a ingerir los alimentos de una manera más lenta, lo que facilita la digestión.

¿Por qué recomendamos la comida asiática?

Recomendamos que incorpores algunas costumbres y platos de la comida asiática a tu dieta, por varias razones.

  • Ayudarás a prevenir el colesterol. Sobre todo a tu corazón. Reducirás el consumo de grasas y de azúcares, y aumentarás el consumo de pescado y las aportaciones de omega 3.
  • Descubrirás nuevos tesoros, con las diferentes maneras de cocinar y consumir las verduras. Técnicas como el vapor o el salteado que conserva sus propiedades y con la tempura serán más sabrosas y atractivas, sobre todo para los niños.
  • Si te acostumbras a consumir caldo o sopa de primero, controlarás mejor la cantidad que ingieres después en el segundo plato, ya que estarás saciado. Además, pueden suponer un gran aporte de vitaminas, minerales, etc.
  • Aprenderás a comer más despacio, masticar mejora y saborear y digerir mejos los alimentos. Pero, eso si. Tendrás que aprender a comer con palillos, lo cual no resulta siempre fácil.
  • Aportarás nuevos platos a tu dieta y degustarás nuevos sabores. Por ejemplo, si aprendes a hacer platos con tofu, soja o algas. Será toda una experiencia que valdrá la pena.

De todas manera, ya sabes que son recomendaciones generales, algunas muy fáciles de implementar en tu día a día. De todas formas, esto es recomendable para cuando comemos o cenamos en casa, donde solemos cometer menos excesos. Por lo demás, no abuses de los alimentos crujientes, ya que son fritos y poco saludables. Asegúrate de que no tienes alergia a ningún alimento que no hayas probado antes, como la soja u otros. Y en el caso del pescado, busca siempre especies que no sean demasiado grandes porque son las que menos mercurio acumulan en su carne.